El movimiento disidente colorado Fuerza Republicana planea postular a su líder, Daniel Centurión, a la presidencia de la Cámara de Diputados, en un contexto en el que el escenario político ha cambiado notablemente desde un acuerdo informal con el movimiento cartista Honor Colorado.
Las conversaciones acerca de la mesa directiva del Congreso comenzaron «prematuramente», pero el miramiento considerado «prudente» plantear ya el movimiento disidente su postulación y comenzar negociaciones dentro del Partido Colorado y eventualmente con la oposición. El movimiento oficialista cartista Honor Colorado, con el apoyo del presidente Santiago Peña y negociaciones lideradas por el vicepresidente Pedro Alliana, habían llegado a un acuerdo informal según el cual la presidencia de ambas Cámaras recaería en miembros del cartismo durante el primer año.
Sin embargo, la migración de 11 miembros de Fuerza Republicana al cartismo y el anunciado intento de reelección del actual presidente de la Cámara de Diputados, Raúl Latorre, bajo la bandera cartista, han minado significativamente el poder de negociación del movimiento.
Centurión opinó que el intento de reelección presidencial sería un «grave error político» y expresó su deseo de que la corriente racional del cartismo convenza a su líder, Horacio Cartes, de esa realidad. Centurión tiene expectativas de que su movimiento pueda lograr un buen resultado en las elecciones legislativas.
En relación con la expulsión de la senadora Kattya González, Centurión aseveró que la forma en que se dio su salida fue «absolutamente innecesaria» y refleja que el grupo arcaico del cartismo busca aprovechar su mayoría para imponer su voluntad. Expresó su preocupación por el liderazgo del partido. También señaló que las decisiones del partido podrían causar un desgaste terrible en la ANR.