ÑEEMBUCÚ – Py.
El Ministerio Público continúa investigando el hallazgo de los cuerpos sin vida de una niña de 12 años y su padre, ocurrido en una vivienda de la colonia Belén, distrito de Tacuaras, departamento de Ñeembucú.
Las primeras hipótesis apuntan a un presunto caso de homicidio seguido de suicidio.
La menor había sido reportada como desaparecida el pasado 11 de mayo por su madre, luego de que fuera vista por última vez en la compañía Costa Alegre de Ypané, en el departamento Central, cuando fue llevada por su padre. Ambos fueron encontrados sin vida días después en una vivienda ubicada en una zona rural e inhóspita, según indicó el fiscal coadyuvante Federico López.
“Presentan heridas de arma de fuego. A simple vista, todo indica que se trataría de un homicidio y posterior suicidio”, declaró el fiscal en entrevista con radio Monumental 1080 AM. Agregó que en la escena se encontró un arma cuyo calibre coincide con las lesiones observadas, aunque la causa exacta de muerte será determinada tras la autopsia en la Morgue de Asunción, a cargo del médico forense Pablo Lemir.
Según los investigadores, no existen indicios de robo, ya que se encontró una billetera con dinero en el lugar. Tampoco se observaron señales de lucha. “La niña parece haber estado durmiendo al momento del hecho. Ambos fueron hallados en una cama”, detalló López.
Además del arma de fuego, se hallaron otros elementos llamativos, como una figura de San La Muerte y un frasco de insecticida en el piso, cuya relevancia será analizada durante la autopsia.
Entre las hipótesis manejadas, el fiscal mencionó una posible reacción del padre ante la ruptura de la relación con la madre de la niña. “Se habla de un desequilibrio emocional. La mujer relató que el hombre se volvía violento cuando consumía alcohol y portaba armas de fuego”, explicó.
El hombre no tenía antecedentes penales ni órdenes de restricción en su contra. De hecho, era la tercera vez que visitaba a sus hijos desde que se separó de la madre.
Por su parte, el médico forense de Ñeembucú, Abel Ruiz, señaló que los cuerpos presentaban un avanzado estado de descomposición. “Calculamos que llevaban entre 36 y 48 horas de fallecidos. Se hallaron dos tipos de armas de fuego y otros elementos, pero debido al estado de los cuerpos no se pudo extraer la bala, por lo que fueron trasladados a la capital para un análisis más exhaustivo”, precisó.
El Ministerio Público continuará con las diligencias para esclarecer el caso y determinar con precisión la secuencia de los hechos.
