Los jubilados que pertenecen a la Caja de Jubilados y Pensionados del Personal Municipal (CJPPM) llevan 73 días en la carpa de la resistencia ubicada en frente a la sede en Asunción y ayer nuevamente se movilizaron para exigir la intervención de la institución antes de un inminente quiebre.
Los manifestantes alegaron que no existe previsibilidad en el pago de sus haberes, que desde junio del año pasado no es constante.
“Ya no hay confianza en esta administración y hay un peligro inminente de quiebre de la Caja. Cuando una empresa hace préstamos para pagar salarios está cerca del quiebre y ellos hicieron prestamos. Por eso pedimos al Presidente de la República que se ponga los pantalones; no las pilas, y ordene la intervención de la Caja para saber qué pasa realmente con la plata de los jubilados”, dijo Duarte.
Según los datos de la institución, la situación deficitaria es por la falta de pago de las comunas por sus funcionarios. En febrero solo 45 municipalidades aportaron.
